De tu espalda
conozco
tres lunares pequeños.
Uno, dulce y amable;
otro, cálido y tierno;
y el menor, asustado,
escondido entre ellos.
De tu espalda
mis dedos
respetaron el sueño.
De tu espalda
conozco
tres lunares pequeños.
Uno, dulce y amable;
otro, cálido y tierno;
y el menor, asustado,
escondido entre ellos.
De tu espalda
mis dedos
respetaron el sueño.
MUCHAS COSAS PARA DEBATIR Y OPINAR. ES LO QUE HACE QUE EL BLOG MEREZCA LA PENA.
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Respuesta a Duran i Lleida del "Ciudadano Mohamed"
"Una sociedad es democraticamente madura cuando ha asimilado la experiencia de que la política es siempre decepcionante e inseparable de la disposición al compromiso y de la frustación". Daniel Innerarity: "Los sueños y las urnas".
Tu registro poético no desmerece de los otros que tienes.pero no sé si aquí destapas a alguien...y se mosquea.ja.ja.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias, María Jesús. A nadie destapo, la bella desconocida ya tenía la espalda destapada. Fue una sencilla mirada limpia y relajada que crei merecia traducir a palabras. Un beso
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