domingo, 13 de diciembre de 2009

Revuelta


Nadie sabe dónde comenzó ni quién la puso en marcha. Se especula con una convocatoria surgida en las redes sociales de Internet, en las web antiglobalización o simplemente en el boca a boca del creciente hartazgo planetario. En realidad llegados a este punto lo de menos es el origen. Lo importante es poner algo de cordura y buscar soluciones que faciliten la creación de un nuevo orden mundial.
Ya ha pasado una semana desde el inicio de la revuelta que está poniendo en jaque a todos los gobiernos del mundo y a las instituciones globales que legislan sobre flujos aéreos, marítimos y terrestres de personas y bienes. Muchos policías, algunos miembros del ejército y numerosos magistrados están pasándose al bando de los amotinados ciudadanos. Por ejemplo, cuentan que en Australia el parlamento ya ha aceptado que para poder viajar a otros países es suficiente con mostrar la tarjeta de embarque del correspondiente vuelo. Los hay que lo ven como el principio del fin de los pasaportes, los visados y el resto de documentos identificativos. Probablemente no sea para tanto, pero en Barajas y en el resto de aeropuertos europeos las conversaciones entre los representantes de la recién constituida Unión Europea de Viajeros y las autoridades continúan. Los mediadores no dan abasto y las asociaciones de consumidores siguen haciendo llamamientos a la calma y proponiendo nuevos consensos. Parece que hay avances sustanciales en la racionalización de los controles de seguridad y se da por aceptada la abolición del overbooking. Sin embargo, las negociaciones siguen encalladas en los puntos esenciales que provocaron el conflicto: los intolerables condicionantes administrativos para la entrada y salida de los estados, las tasas aeroportuarias y los tramites aduaneros.
Mientras se negocia, los pasajeros de todo el mundo siguen negándose a rellenar los ridículos impresos de inmigración, rechazan quitarse el cinturón y los zapatos y no aceptan cacheos arbitrarios en los puntos de control policial previos al embarque. La consigna establecida mundialmente que animaba a presentarse en los controles con botellas de agua de más de un litro y grandes tubos de dentífrico, ya es seguida por la inmensa mayoría de los viajeros aéreos. Las sentadas y bloqueos masivos a la salida de los aviones en solidaridad con los pasajeros afectados por impedimentos administrativos y legales, ya empiezan a ser menos necesarias. Como signo de buena voluntad, en algunos aeropuertos y fronteras terrestres las fuerzas del orden más concienciadas han llegado a retirar provisionalmente las banderas y los símbolos nacionales. En paralelo a la pacífica protesta que estas semanas se ha generalizado por todo el planeta, el tráfico de cayucos entre Africa y Europa ha disminuido sustancialmente. Ayer, una nueva ONG llamada Controladores y Pilotos Sin Fronteras, sacó a Aminetu Haidar de Lanzarote y la dejó en manos de su familia en El Aaiún, ante la estupefacción de las autoridades marroquíes que nada pudieron hacer para evitarlo ante la multitud de ciudadanos llegados de todos los puntos del Magreb que la llevaron en volandas desde la pista de aterrizaje hasta su casa. Allí sus hermanos la esperaban con un cuenco de dátiles y otro de leche de cabra. En España, algunas clases de geografía en las que se estudian las fronteras, las banderas y los estados han sido aplazadas hasta ver como acaba esto.
Por mi parte espero que aunque nada de lo relatado haya ocurrido ni vaya a ocurrir nunca, el viernes cuando esta transgresión informativa vea la luz, una mujer menuda tan tozuda como nuestros virtuales viajeros amotinados, todavía esté viva para disfrutar con sus hijos de la hermosa luz del atardecer en el desierto del Sáhara.
Artículo publicado en La Región el viernes 11/12/09

2 comentarios:

  1. Esto si que es "creación pura"( Suso de Toro dixit).Sacado de la nada casi absoluta-siempre hay una costilla de o desde donde se sacan u originan las cosas:puede ser el deseo de que sucedan-o un atisbo de como serían si sucediesen.En cualquier caso...¡bendita imaginación!
    Un abrazote.

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  2. Realidad y deseo. Esa balanza que bien equilibrada puede mover el mundo sin la violencia de la guerra. Es el titulo del libro de uno de mis poetas favoritos: Luis Cernuda.
    Utopía y razón bien combinadas componen un ser humano maduro y solidario, joven y lucido... Saramago, Ortega, Goytisolo...
    Que bien hariamos si los escucháramos más

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