jueves, 20 de agosto de 2009

La sanidad en la encrucijada


La Sanidad es una empresa basada en el conocimiento. Por ello, el elemento capital para su buena marcha es la gestión de ese conocimiento. Hoy en día eso implica además de una formación permanentemente actualizada, conjugar en la práctica diaria conceptos como calidad, seguridad del paciente, eficiencia, coste-beneficio..., imprescindibles para el presente y el futuro de las empresas sanitarias, especialmente de los sistemas sanitarios públicos.
La cuestión es que son los profesionales y los equipos que producen cuidados de salud, los agentes que pueden y deben interpretar estas cuestiones desarrollando la gestión por procesos, la ambulatorización de los mismos, la cirugía mínimamente invasiva, la racionalización de la prescripción farmacéutica, etc... Son, sin duda, los que en su mano o en su bolígrafo tienen las claves para gestionar una sanidad de calidad, eficiente (dos conceptos que ya deben considerarse sinónimos), equitativa y sostenible. A ellos debe, por tanto, trasladarse la responsabilidad, exigirse la necesaria coordinación productiva y concederse los recursos necesarios para alcanzar los resultados de salud que la comunidad pretenda conseguir con el presupuesto que para ello destine. Por supuesto, con el paciente como único objetivo de la aplicación del conocimiento.
A los Servicios Centrales de Salud Autonómicos y a las Gerencias de los centros de Atención Primaria u Hospitalaria les corresponde facilitar esa tarea de gestión clínica por los Servicios y los profesionales, asignando recursos, velando por la obtención de resultados y garantizando la calidad y equidad de los mismos. Buscando también formulas retributivas nuevas y transparentes que escapen del corsé funcionarial y se fundamenten sobre todo en el cumplimiento de objetivos. Con el máximo grado de autonomía posible para los Servicios o Unidades Operativas y Funcionales. El recorrido de las diferentes fórmulas, ya ensayadas en su mayoría, de gestión macro es a día de hoy limitado, por lo que los debates sobre “área sí o área no” o cuestiones parecidas me parecen de importancia secundaria. Lo fundamental y donde nos jugamos el presente y el futuro está en la base de producción: en suma, en la relación entre profesional sanitario y paciente/comunidad.
Dicho esto, es básica, sobre todo en la sanidad pública, la confianza en los profesionales que la integran. Por supuesto, que como en toda actividad laboral, hay en los sanitarios diferentes grados de competencia o compromiso individual con el paciente o la empresa, pero en Galicia y en España el grado de formación, el nivel y la actitud son, en general, muy altos en las profesiones sanitarias, como lo atestiguan las encuestas de prestigio social por profesiones. Por ello es especialmente injusto que en estos días se deslice, interesadamente, el mánido y simplista argumento de que los médicos en los hospitales trabajan poco por las mañanas para que les concedan y paguen horas extras por las tardes. Es incierto. Hay, claro está, márgenes de mejora para optimizar la actividad en el tramo horario matutino. Sigamos trabajando en esa línea.
Pero eso nada tiene que ver con el trasnochado modelo de hospital sólo de mañanas. ¿Qué empresa con la inversión tecnólogica que tienen los centros hospitalarios públicos no la amortizaría ampliando los tramos horarios de actividad, sobre todo, como ocurre en este caso, si hay suficiente demanda (lista de espera) por cubrir? Generemos plantillas suficientes en los servicios para a través de mecanismos de deslizamiento de jornada, mantener actividad asistencial ordinaria vespertina, cuando sea necesario y conveniente. Es sin duda lo más eficiente en términos de calidad y coste. Y en los casos en los que no haya profesionales disponibles, busquemos fórmulas para resolverlo con prolongación voluntaria del horario.
¿Deben hacerse reformas para que las retribuciones por estos conceptos complementarios sean transparentes, normalizadas, se ajusten a resultados y no arrojen dudas sobre supuestas perversiones? Sin duda. Otros servicios autonómicos de salud ya lo han hecho. Las bases para ello están esbozadas en el Acuerdo Marco firmado con las centrales sindicales en el primer trimestre de este año. Desarrollémoslas cuanto antes. Pero no dejemos de dar respuesta, mientras tanto, a los pacientes en espera utilizando de forma óptima los recursos que tiene la Sanidad Pública de Galicia.
En el contexto del necesario avance hacia la gestión clínica, hacia el paulatino traspaso de responsabilidades y recursos a los que, a través de la eficiente aplicación práctica del conocimiento que poseen, pueden garantizar el futuro de esta importante pata del estado de bienestar: los profesionales sanitarios.

2 comentarios:

  1. Gracias por tu defensa a los profesionales sanitarios, gracias por tu defensa a la sanidad publica .
    Últimamente, debido a la opinión de nuestros gestores, me estaba viendo inmersa en una masa informe de holgazanes y peseteros .
    En tus palabras se nota que eres medico y medico hospitalario con amplia experiencia , que conoces las entretelas, el funcionamiento y las patologías tanto medicas como organizativas, las carencias y los excesos. No estamos en la General Motors ....... y no es lo mismo .
    Pero eres demasiado sutil y educado Chechu ....... yo les diría a los que interesadamente levantaron esta polvareda que :
    *nos sobraban jornadas de tarde, nos volvíamos locos para cubrirlas porque nos suponía un exceso de trabajo ( jornada de mañana, guardias, , prolongaciones) y las plantillas no son amplias , no están completas.
    *la mayoría del personal tenemos un alto grado de compromiso con nuestro trabajo y en muchísimas ocasiones es el esfuerzo personal lo que hace que el proceso no se pare.
    *no solo hay que haber estudiado medicina sino haberla practicado y a poder ser en un medio hospitalario para saber como es un hospital y como funciona (eso no se estudia) . Y hay que ser bastante imprudente para a un mes de haber llegado a una "casa" decir que está desorganizada y desestructurada , cuando no has ni abierto los armarios. y declarar que sus puntos fuertes son dos aceleradores lineales .................... pues nada ¡ mi niña! mándales a que pasen las consultas y operen por la tarde .
    Por supuesto que hay márgenes y siempre todo es mejorable , pero no destrozando lo que ya tenemos y está bien sino buscando formulas nuevas que faciliten , incentiven, disminuyen burocracia y nos permitan mejorar la CALIDAD de la asistencia no solo la cantidad.

    ResponderEliminar
  2. Yo sé muy bien la verdad de muchas de las cosas que dices. Sé que, en nuestro hospital, con frecuencia las peonadas se hacían casi por favor. En todo caso nunca detecté, salvo casos aislados, una dinámica para "conseguir" peonadas. Claro que hay gente que curra mucho y otros que curran menos, pero eso nada tiene que ver con el dinero y las peonadas. Ese es otro problema al que sin duda había que poner solución.
    Si relees el artículo comento que la mejor solución es dimensionar las plantillas en función a la actividad previsible para dar respuesta a las necesidades de los pacientes y que contratar es mucho más barato y de más calidad que hacer horas extras. Siempre que sea posible. Así lo hicimos todo lo que pudimos en nuestra dirección. De ahí, y contando con el presupuesto de PERLE que ahora quieren ahorrarse aumentamos en más de 50 facultativos y enfermeras las plantillas del hospital. Pero también es necesaria la flexibilidad de la gente para que todo esto sea posible y sostenible. ¿Qué problema hay en trabajar un día de tarde cada dos semanas por ejemplo en vez de mañana, de una forma rotatoria? En estos aspectos si que hemos notado falta de compromiso de la gente con la empresa. Aunque comparto que si esto en general chuta es por los profesionales, los que curran poco son compensados con creces por los que curran más de lo exigible. Y ese es otro problema de justicia que deberiamos corregir. Y todos podemos poner nombres. Conociendo los hospitales no hacen falta mediciones sofisticadas.
    Gracias Rosa, seguiremos jugando a arreglar el mundo, eso hicimos siempre y lo seguiremos haciendo.

    ResponderEliminar