viernes, 5 de febrero de 2010

Oráculo

Esta ha sido una semana de nubarrones económicos. No por esperables, menos impactantes. El riesgo de nuevas tensiones en los mercados de deuda pública, puesto de manifiesto en el moderno oráculo mundial de las finanzas en Davos, ha obligado a España a tomar decisiones rápidas y ofrecer un escenario de cierta credibilidad a corto y medio plazo. Nuestro déficit público está en el punto de mira del mercado, por mucho que objetivamente sea menor al de otros estados considerados más “saludables” que el nuestro. Y una mayor penalización en los bonos de deuda provocaría graves efectos para nuestra maltrecha economía.
Las últimas medidas que el gobierno ha anunciado son correctas y el duro plan de ajuste que contienen está en la línea que los expertos llevan tiempo aconsejando. A este plan de ahorro deben sumarse las Comunidades Autónomas y los Ayuntamientos, sean del color político que sean. Y los ciudadanos debemos entenderlo si nos lo explican bien.
Se acabaron los tiempos en los que se podía jugar a la política con las cosas de comer. España ha dejado de ser un país de ricos, por mucho que nos duela. No es fácil adaptarse, pero toca. El oráculo global nos está mirando y le encanta la sangre de las víctimas propiciatorias. No miran a Zapatero, ni a Rajoy ni a los parados. A los tiburones de Davos no les importan nada nuestras peleas domésticas. Son calculadamente simplistas: o se cotiza a la baja o al alza. No hay términos medios ni tiempo para análisis más matizados. Ni Europa ni nadie nos va a defender de ellos. Basta con ver el ejemplo de Grecia.
Adelante con el recorte de gasto planteado y con una reforma laboral pactada política y socialmente. Adelante también con el debate sobre el retraso en la edad de jubilación. Es oportuno y responsable, aunque pueda restar votos. No es una cuestión ideológica, es un hecho demográfico. Igual que lo es la necesidad de contar con otros siete millones de inmigrantes para mantener nuestra estructura productiva en 2030. Aunque sólo sea por eso, no es de recibo sacar a pastar ahora el espantajo populista sobre este fenómeno, consustancial con un mundo globalizado.
Tampoco es aceptable la actitud del PP reaccionando de igual modo, sean cuales sean las propuestas del gobierno. Coincidan o no con las suyas. Siempre con la misma descalificación a la totalidad. Sin matices. Demasiado fácil. Un candidato a presidente, al que ahora además las encuestas favorecen, no puede instalarse comodamente en “el cuanto peor mejor”. No es lo que necesitamos. Rajoy debe ayudar en esta difícil coyuntura. Las elecciones están aún lejos y la grave situación economica demasiado cerca. Zapatero también debe olvidarse de estrategias y prejuicios, tragarse los sapos que haga falta y encontrar, por muy díficil que le resulte, la concertación con el PP. Un ministro ya lo está haciendo: Ángel Gabilondo.
Ninguna idea mejor que crear nuestro propio oráculo de expertos para ponernos en sus manos. Y despues hacerles caso. Un excelente ejemplo es el documento de reflexión sobre las necesarias reformas, recientemente firmado por personalidades ideológicamente transversales como Rato, José María Fidalgo o Eguiagaray. Ninguna imagen más potente para los tiburones que nos miran desde el agujero negro del mercado que un pacto de los dos grandes partidos para nuestra recuperación económica, con el apoyo de un grupo de notables con suficiente prestigio internacional. Los tenemos de todos los colores.
Es el momento de la generosidad política. Quien no la demuestre y opte por el populismo del corto plazo, debería percibir el rechazo de la sociedad civil. Para cambiar a tiempo de registro.

4 comentarios:

  1. Chechu: Te olvidaste de quitar lo de las naranjas y de poner quién hizo las orejas que tienen muy buena pinta.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  2. Jolín, casi no me das tiempo

    ResponderEliminar
  3. El tema me sobrepasa, estoy perdida en algún lugar entre Davos, Bruselas, Madrid y Santorini. Leo y leo y trato de entender. Esos hombres y mujeres de cultura liberal que se reúnen cada año en Davos y que para mi no tienen cara, solo una imagen de dólar o billete de 500 euros; son los que mas tienen pero no están dispuestos a dar nada salvo pautas que les permitan seguir siendo "lo mas", incluso ¿manipulan presentando una visión de España deliberadamente negativa a fin de presionar al gobierno español para que haga los cambios que ellos desean?. O ¿desestabilizan las economías mas débiles de la UE para obtener grandes beneficios bursátiles?. Según The Finalcial Thimes, los pasados 2 y 3 de febrero, los 'hedge funds' apostaron 7.600 millones de dólares contra el euro. Y ganaron muchísimo dinero, porque durante esas 48 horas, la moneda única sufrió una fuerte depreciación.
    Bruselas convulsiona, hay que evitar el efecto domino y España saca a sus embajadores para explicar que nosotros no estamos tan mal.
    Si, que hay que hacer reformas y pactos. Es intolerable que un banco tenga unos beneficios de 8.000 millones de euros en el 2009, año de la crisis, posiblemente es inmoral que los políticos ganen y gasten lo que que ganan y tengan una pensión impresionante a partir del 7º año trabajado. Hay que terminar con el paro, es insostenible y cruel.
    No lo puedo evitar, ahora viajo a Santorini, zona 0 de la crisis, pero allí hay luz y la gente tiene cara y, a pesar de todo..... sonríe.

    ResponderEliminar
  4. Es desconcertante esto del capitalismo. Todo es artificio. El mismo artificio cuando se está oficialmente en crisis que cuando se está en la senda del crecimiento. Pero estamos en sus manos ¿las de quienes? ¿las de esos que ganan una porrada de pasta en una de estas extrañas convulsiones del mercado? No lo se. Lo malo es que no se vislumbra una verdadera altenativa a este voluble e injusto orden mundial. Y no queda más remedio que, mientras una nueva generación lo sustituya por algo mejor, adaptarse a Davos, a ellos, a los amos sin rostro, porque la justa rebelión traería circunstancialemente la perdida de tantas cosas por las que hemos luchado. Para nosotros y para los nuestros, los más cercanos... Al menos por un tiempo. Lo que a estas alturas de la vida se me antoja demasiado doloroso. Quizás sea la cobardía que viene con los años, o el instinto de conservación. Disfruta del sol del profundo Mediterraneo y de ese intenso azul del mar que no existe en otro lugar de la tierra. Y de una buena musaka regada con olorosa resina. Bicos. Seguro que como siempre todo se arregla al final, al menos hasta ahora siempre ha pasado.

    ResponderEliminar